Llego octubre, otoño, la estación de la melancolía, Saymond my first boy cumple el ultimo del mes. Me pidió sugerencias para su cumple, “donde puedo viajar para mi cumple con mi novia?”, sin dudar le dije Niagara Falls.
Me he comido el mundo atraves de imagines y lugares fantásticos a los cuales no he podido ir por diferentes razones. Soy mama de cuatro pero si algo saben ellos es de mis ansias por conocer el mundo.
Así que una vez dada la sugerencia el comenzó hacer su búsqueda sin dudar, pues sabia que ese seria el lugar perfecto.
Llego el día del cumple, pero no se fue me dijo que decidió quedarse.
Lo lamente porque sabia que perdía mi oportunidad de conocer Niagara Falls atreves de los ojos y las fotos de mi hijo y pensé será en otra oportunidad.
El Niágara quedo atrás siguiendo el día a día, lo cotidiano.
Ahora vienen mis 50. Sagitariana, libre, soñadora y aventurera todo ello ha estado siempre guardado en mi heart forever.
Los cuatro llegan a mi habitación y con ellos una tarjeta dedicada para mi birthday pero aun no es el día.
Comencé a leerla y como siempre mis ojos se llenaron de lagrimas, ahí estaba el regalo adelantado de mis 50 años pensado pero siempre soñado.
Entre mis manos los boletos e itinerario completo para el Niagara Falls.
El regalo perfecto y planeado a escondidas para sorprenderme, una tarea de cuatro lograda con éxito.
Comienza la Aventura
Mi primera aventura a los 50 años seria fantástica deseaba estar ya en las cataratas día a día lo pensaba, planeaba y soñaba ahí junto a mi amigo y compañero de sueños.
Llego el día y ya listos para viajar nos vamos en Allegiant, una aerolínea pequeña. El hotel ya estaba reservado pues mi paquete de cumple contenía todo, pasajes aéreos, winery tours, hotel y hasta paseo en helicóptero.
Allegiant salió puntual llegamos al Niagara Falls Airport en Buffalo, NY de ahí, según el itinerario tomaríamos un taxi y pasaríamos la frontera a Canadá.
Niagara Falls
Al pasar el punto que divida USA de Canadá mi corazón latía a mil por hora la inmigración fue rápida y sin complicaciones, llegamos de noche. El lugar esta lleno de luces y colores el taxista muy amable un chico joven nos lleva al Hilton and Suites Niagara Falls View.
El lugar maravilloso, mis cuatro cuidaron de todos los detalles pues la habitación tenia vista a las hermosas cataratas, es de noche así que las luces son hermosas, mucho color y el sonido del agua golpeando. Rápidamente colocamos los abrigos y salimos directo a ver las cataratas ahí de cerquita lo mas cerquita posible.
Ya no las vería atreves de imágenes, las conocería. Un sueño hecho realidad las escuchaba y veía sus luces, esa noche tomamos fotos caminando conociendo el lugar y cenamos en Pranzo un restaurante Italiano justo al lado del hotel. Un lugar acogedor y de buen servicio, ahí nos enteramos que en Niagara Falls se pagan tres impuestos.
Llego la mañana y despertamos con ese sabor a aventura que no sabes describir, recordé que de mi ventana la noche anterior podía ver las cataratas así que salte de la cama corrí la cortina y guau.
Magnificentes, imponentes, ahí estaban las cataratas puedo decir que las cataratas de noche son de color pero en el día todo cobraba vida de nuevo.
El hotel nos dio unos cupones de descuento para el desayuno y la cena así que luego de fotografiar la vista de nuestra ventana salimos a desayunar.
El desayuno tipo buffet sin duda muy Americano. Ahora si íbamos a bajar a las cataratas del Niágara cualquier adjetivo que utilice para describirlas no seria suficiente, el punto es vivir las cataratas.
A las 12 del mediodía de vuelta al hotel pues hoy es el winery tasting, conocimos Reif Estate, Pillitteri Estates y otras pero fue Reif donde me enamore del ICE wine canadiense exquisito en su textura y color con cuerpo y un sabor placentero. En la Pillitteri reafirme mi amor al ICE wine este fue un tour de empaparte de conocimientos, sabores y degustaciones de los vinos mas importantes en la zona.
Cinco y media de la tarde y seguimos tasting wine. Finalmente de vuelta al hotel.
Paseo en helicóptero
Tengo miedo a las alturas y a los helicópteros.
Me asuste un poco y detuve mi camino a la maquina por unos segundos, y recordé el ultimo libro que leí “La Mujer de Mis Sueños” por Luzma Doria donde habla del miedo que no es mas que nuestro propio enemigo y que solo nosotros le damos vida, así que continúe mi camino dispuesta a disfrutar de mi viaje, dejando el miedo.
El paseo en helicóptero es maravilloso pues te permite ver las cataratas americanas y las de Canadá desde su nacimiento en todo su majestuosidad.
Hoy ha sido un día intenso después de nuestro paseo en helicóptero, vamos a conocer las cataratas en bote.
Aquí estamos con impermeables y listos para navegar junto a las cataratas es todo un aventura, mi sensación cuando nos acercamos a las cataratas es esa conexión con aquello que esta pero no puedes ver, es una sensación que va un poco mas allá, es limpieza del alma.
El paseo en bote es maravilloso te acerca a esta maravillosa creación. Vale la pena.
Podemos decir que por aire, tierra y agua hemos conocido las cataratas, las hemos vivido.
Rompiendo Temores: Zipline
El temor a las alturas y el deseo de vivir el momento habiendo sacado el miedo era otro paso importante era comprobarme a mi misma que podía hacerlo.
Es maravilloso podía saborear el viento con las gotas de agua que golpeaban mi rostro en fantástica caída.
Si, mi itinerario contenía el Skylon Tower es uno de los lugares mas populares y puedes ver las cataratas desde adentro o salir al deck.
La vista es espectacular the Falls, Niagara Wine District, the Great George, the bridge puedes disfrutar de la película antes o despues del Skylon tour y conocer la leyenda de las cataratas.
Paseo por el downtown
Es un lugar lleno de luces y colores, lleno de alegrías e historias; en el downtown decidimos subir a la Niagara Skywheel reafirmando que el temor a las alturas estaba fuera. Durante 8 minutos logramos disfrutar de la magnificencia de las cataras. Desde cualquier lugar ellas son siempre una vista espectacular.
Cena para dos
My birthday gift, si, también tiene una cena para dos en el Watermark Restaurant es justo en la víspera de mi cumpleaños. Nuestra mesa tiene vista a las cataratas pero de noche lucen su traje de gala, todas llenas de luces así que nunca dejan de impresionar.
Al final el ultimo día tal como lo decía la leyenda las cataratas con su magnificencia me regalan un hermoso arco iris.
Happy birthday to me from Niagara Falls!